sábado, 11 de octubre de 2025

EL RETRASO DE LA MODA

Hablar de moda hoy, a mí me parece que debe quedar para la estética, vestir, cuidar la piel, el pelo, los adornos, joyas etc. Para quienes estén interesados en ello, lo demás, hablar de moda hoy en pleno siglo XXI, con la inteligencia artificial por encima de nosotros, dándonos por donde le dan alos calderos, porque los humanos tenemos mucha pereza para pensar, trabajar, estudiar, por cuenta propia, y algunos despistados, decidieron la globalización que acabaría con el hambre, y con lo que están acabando es con la vida en este planeta, y haciendo que el sufrimiento se instale como algo necesario. Y no. Donde hay entendimiento y conocimiento, el sufrimiento se convierte en maestro que transforma en poder que disuelve en sabiduría y fuerza creadora, sanando la herida que lo produce. Hablar de moda es lo más antiguo, pero lo peor es el retraso que produce la creencia. Creer no. Confíar es fe en uno mismo, y la fuerza de la verdad en la esperanza de lo que ha de llegar, sin temor por nuestros errores pasados. Hacer mal uso de los medios, es la moda más antigua de la mayoría que lleva a la desesperación por no confíar en la esencia poderosa de su ser. Yo sufro una moda llamada herencia perniciosa, donde nada es lo que parece, y los ricos deberían tenerlo presente, unos heredan sin pagar, otros pagan por que los hereden. (Qué lio verdad). Así andan las modas y los modos en este mundo de fronteras, septas y deudas, empeñadas en parecer sin ser, en lugar de ser estudiosos de la vida.