A LA CASA DEL PADRE

A la casa del padre,
te has ido como querías.
Y algo nuestro te llevas contigo.
duele la ausencia,
pero es el destino.
Por entre las estrellas suspiros.
Que el amor siente vacío,
y a la vez alivio.
Cuanta veces el salmo noventa y uno.
Y solo al final tres veces interrumpido,
para que Vero y Fran cocluyeran.
Regresaste a la casa.
A la casa de donde venimos.

SOY ANTISISTEMA

Pronto las tiendas de ortopedia superan a las zapaterías.
Un sistema en el que ocurre semejante despropósito, no se puede tolerar.

Soy anti sistema, porque amo la salud.

Soy anti sistema, porque amo la alegría que nace del corazón, y no la falsa sonrisa.

Soy anti sistema, porque si voy al hospital quiero sentir confianza.

Soy anti sistema, porque amo la libertad.

Soy anti sistema, porque busco la verdad.

Soy anti sistema, porque no puedo aguantar que la ignorancia pese más que la bondad.

Soy anti sistema, porque ya no puedo más, ver a donde nos va a llevar.