miércoles, 23 de febrero de 2011

23 F 1981

¡Qué bien que podemos celebrar la odisea! Treinta años después, coincidiendo, para bien o para mal, (esperemos que para bien), con el levantamiento de los pueblos oprimidos contra la esclavitud.
Hoy podemos recordar lo bueno y lo malo de aquella convulsión, que nos recordó, un tramo de la historia anterior inmediata.
Su amenaza nos hizo pensar en un nuevo fracaso, en un nuevo retraso.
Al fin, una comedia de dieciocho horas de duración, que terminó bien, como cualquier obra de teatro. Eso fue lo bueno. lo menos bueno es, que treinta años después ¿Sabemos a donde querían ir? ¡Cuando se mueran nos lo dirán!

domingo, 13 de febrero de 2011

PLAN ESPECIAL, ¡FUERA!

He oído hablar de la ley del sesenta y siete. Sabía que había alguna ventaja para aquellos afiliados a la Seguridad Social antes de ese año.
Olvidé que las antiguas criadas, hoy en el año 2011, después de haber soportado el peso de todas las cargas sociales, aún con el nuevo nombre de empleadas de hogar que se les dio hace unos cuarenta años siguen en el plan especial, que sí que es especial por humillante y rácano.
Aunque haba disminuido esta tarea, sigue siendo tan importante, que si un día decidieran (cosa poco probable) hacer una huelga general, el plan especial no sería el de la Seguridad Social, sino que sería especial en su conjunto.
Toda la vida han estado callando, sufriendo y sabiendo sin que se note nada.
A las empleadas de hogar que comenzaran antes de 1967 a trabajar con doce, catorce o quince años, esa ley no les dice nada, ni a ellas ni a los autónomos del campo. Y digo a ellas porque hasta ahora es casi exclusivo femenino.
Menos mal que a las limpiadoras en el régimen general les cambia un poco el panorama. Aunque atrapadas ahora en grandes empresas establecidas en los últimos veinte años, que algunas bien merecerían una investigación y que el pueblo sepa quién las creó y de quién son.
Nadie imagina lo que sería una huelga total de los servicios de limpieza, que al parecer son esos seres que tan poca importancia tienen en la sociedad. Muy poca gente valora el sagrado oficio de limpiar.
Pero vuelvo al servicio doméstico, donde se ha trabajado las veinticuatro horas del día.
La falta de independencia, viviendo en el lugar de trabajo donde algunos, muchos, empleadores, no permitían más tiempo libre que el de comer, dormir y unas diez horas a la semana en el mejor de los casos. Pues aún los había peores. Evidentemente los había mejores, pero muy poquitos.
¿Ha cambiado algo el Plan Especial de Empleados de Hogar con la reforma de las pensiones? Esperemos que sí.

sábado, 5 de febrero de 2011

IRMÃ FÁTIMA ADELAIDE

Adelaide Ramos Bilo.
Entre Espanha e Portugal.
Para alegria dos pobres
ferreirinha nada mais.

Nada mais e nada menos
fose humilde peregrina.
Passo de ser Adelaide,
a ser Fátima madresinha.

A sua força e juventude
foram para Deus e os homens.
Aqueles que as suas doenças
foram doenças de pobres.

Pelas ruas empedradas,
ruas de Aldeia da Ponte
foram seus primeiros passos
brincadeiras nas suas fontes.

Pelas ermidas de Aldeia.
Por chafarizes e pontes.
Suas brincadeiras a final,
a sua escola, os seus montes.

Por encima de autarquias
desde Galiza a Aiamonte
foi a vida de Adelaide.
Caminhos de Trás-os-Montes.

Em procurar a verdade
foi Fátima pelos caminhos.
Saúde de os doentes,
que choravam seu destino.

No meu coração eu tenho,
um altar para meus santos.
Para mi santa Adelaide,
vai a ser um de tantos.

Milagre de uma existência.
Meu ser sana, eu o sento.
A sentir-te tão pertinho.
Também o céu ou tenho perto.

Nove décadas no mundo.
A final teu céu chegou.
Desde ele segues servindo
que o teu amor não morreu.

Adelaide o Irmã Fátima,
os dois nomes de teu ser.
Em o sentir da tua alma
ta grande amor de mulher.