martes, 31 de agosto de 2010

LA ESENCIA ES PEREGRINA

Vivir en un pequeño pueblo del Oeste español,solo se entiende si hay huerto, lumbre, agua natural y tranquilidad. ¡Ah! se me olvidaba el coche, el ordenador y el teléfono. Quizá porque esas necesidades creadas también lo son en la ciudad.
Como el dinero es nuestra obsesión, tanto si abunda como si escasea, y lo es tanto en el campo como en la ciudad. Ese medio se ha convertido en un fin a cualquier edad, y de la edad depende todas las demás necesidades creadas, de su sentir y de sus circunstancias...
Al final, todo esto es el producto del llamado bien estar social, que poco tiene de bien, menos de estar, y tampoco de social.
La esencia se desvanece entre tanto envoltorio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario