viernes, 25 de septiembre de 2020
PARA SER FELIZ
Que los niños aprendan a ser pobres.
El mejor camino para ser feliz.
El que puede vivir con poco,
sabe la alegría de sentir.
Sentir amor sin reservas.
Que se aprende compartiendo,
Sin humillar a los pobres,
que agradecen el sustento.
Sin sabiduría no hay nada.
En la escuela de la vida,
todo se aprende en la calma,
del inicio a la partida.
Purifican las vivencias,
como la arena purifica el agua.
Como la lluvia nacemos
para servir a una causa.
Nuestro paso por la Tierra,
sin títulos ni patrañas.
Sin ningún trabajo fijo,
desde el valle a la montaña.
Antes que existieran libros,
los viejos siempre enseñaban,
lo aprendido de otros viejos,
en la experiencia se graba.
Lo que digeron ancestros,
cuanto hemos tardado en asimilarlo.
Y ahora vemos con tristeza,
las penas que ellos pasaron.
Tenemos pre guerra, guerra,
y lo que nunca falta, posguerra.
Mejor austeridad libre,
que la ruína y la miseria.
Porque lo estamos viendo ya.
Esa plaga del dinero,
que nos enseña a comprar,
las velas de nuestro entierro.
¿Y de qué les sirve a ellos
el poder que aumenta el ego?
Si sus fiestas son amargas,
su subconsciente está preso.
Para apaciguar sus miedos,
sus jolgorios no le bastan.
Para acallar su conciencia,
van maquillando sus almas.
Mostrarse como importantes,
tiene que ser muy pesado.
El que se siente feliz,
es liviano como un pájaro.
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